Toma canela

Ha pasado bastante tiempo desde la última vez que publiqué una entrada en este sitio. Ha habido noticias buenas y malas, qué se le va a hacer...

Pero una de las cosas más espectaculares de estos días tuvo lugar en Madrid, más concretamente en la Plaza de toros de Las Ventas. El 21 de mayo actuaban Morante de la Puebla, Manzanares y Rubén Pinar.

La tarde iba mal, muy mal. Hasta que en el cuarto toro Morante armó un lío de los importantes con el capote. Seguramente ya estéis hartos de verlo, pero aún así yo os dejo un vídeo con el sonido ambiente, que es el que permite ver cómo suena esa plaza muy de vez en cuando cuando alguien satisface su voracidad.

Viéndolo ahora parece espectacular, se ve bonito, se ve poeta, se ve artista. Pero la emoción de verlo en directo aunque fuese por televisión os prometo que para mí fue impresionante. Tanto es así que me tiré unos cuantos días en una nube y toreando al aire por mi casa. Que los toros me dan miedo.

Y para terminar, una anécdota que a mí me parece preciosa: contaban, y en la previa lo confirmó Morante, que el torero de la Puebla del Río la noche anterior andaba un tanto desvelado y no se le ocurrió cosa mejor que agenciarse de las llaves del coso madrileño e irse a hacer toreo de salón por la noche. ¡Quién lo hubiese podido ver! Seguro que algunas de las verónicas del 21 de mayo nacieron ya la noche anterior.