domingo, 9 de septiembre de 2012

Un espectáculo cultural y religioso.


La Historia Te contempla. by Víctor P.C.Supe el otro día a través de Twitter que faltan algo así como 200 días para la próxima Semana Santa. Queda tiempo, claro. Más de medio año.
 
Pero es bonito saber lo que falta para esos momentos culminantes de cada Hermandad y Cofradía por los que tanto trabaja tanta gente, valga la redundancia, durante todo el año.
 
Cuando se sale a la calle en procesión con las imágenes titulares quedan atrás muchos días de esfuerzo y buenos ratos de convivencia. Mucho trabajo de limpieza, de organización, de reunir dinero para la causa, de viajes a otras ciudades más cofrades para aprender, conocer o simplemente comprar.
 
Quedan atrás también, aunque muchos lo ignoren, muchos ratos de oración, de reflexión, Misas de Hermandad, cultos, confraternización con otras hermandades en torno a un altar, catequesis, etc.
 
Y al final se pone en la calle un "espectáculo" cargado de significado religioso y cargado de estética, arte, cultura. Porque ya en la cruz de guía encontramos lo estético (o a veces todo lo contrario) de la orfebrería. Porque a continuación las túnicas pueden ser también pequeñas obras de arte repletas de tradición, y las vemos salpicadas nuevamente con pequeñas o grandes obras de orfebrería, bordado e incluso pintura. Faroles, Libros de Reglas, Estandartes, Ciriales, Incensarios... entre todos estos enseres cada Hermandad tiene auténticas joyas.

Y tras todo ello viene lo más importante: el paso con las imágenes titulares. Los pasos en los últimos años tienden a ser realmente bonitos, con diseños muy trabajados y finamente rematados. Excepciones habrá, no digo yo que no. Y en cuanto a las imágenes, qué decir. Esculturas sagradas, representaciones de Cristo, su Madre, y demás personajes (santos o no) de la Pasión. Lejos queda ya el Barroco que se estudia en Historia del Arte con la Macarena o el Cristo del Gran Poder, pero a día de hoy procesionan tallas antiguas como ésas o modernas de una calidad artística magnífica. En este sentido habrá que ver hacia dónde va el hiperrealismo que se empieza a ver como tendencia en la actualidad acaso por la influencia de Miñarro y sus estudios sindónicos.

La última manifestación artística de cada procesión suele ser la musical en la que grandes y complejas composiciones acompañan el andar de los pasos o tronos estando muchas de ellas grabadas a fuego en la imaginación de cofrades y no tan cofrades.

Y en medio de todo ello un arte también muy singular: el andar del costalero. Cada cuadrilla con su estilo, acorde con su paso o con su hermandad y siempre al compás de la música. Nos regalan momentos extraordinarios que quedan grabados en nuestra retina a base de su esfuerzo y su buen hacer. Sudor, lágrimas y en muchos casos sangre. Su labor es encomiable. Mal que muchos lo consideren ocasión para sacar pecho; el esfuerzo callado, silencioso y anónimo del costalero es el que merece absolutamente todo mi respeto y admiración pues habiendo pasado por ahí sé bien lo que se puede llegar a sufrir.

Conforma todo ello un espectáculo religioso extraordinario que gana en singularidad cuando transcurre por los rincones más bellos de las ciudades de nuestra geografía. Ya queda menos para que vuelva, disfrutemos la espera trabajando para esos momentos y disfrutemos del momento estelar cuando llegue. Es un patrimonio cultural y religioso muy nuestro del que creo que podemos sentirnos muy orgullosos.

3 comentarios:

  1. Todas las cuadrillas tienen el mismo estilo...

    Alfredo

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    1. Claro, la Burra anda igual que la Cena que a su vez anda igual que Regiones. Y Pasión es clavao andando a Gran Poder que a su vez es un calco de Sentencia. Y así todos los días. ¿Es eso lo que quieres decir?

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  2. jajajajaja... Alfredo, no crees que eres un poco exagerao??

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