Otro año más, Adviento.

Con la llegada del Adviento, este blog vuelve a redecorar su portada recuperando la cabecera que ya el pasado año estrené con motivo del Adviento. 

Ya tenemos las luces preparados para su encendido en la ciudad, los clásicos hippies han instalado sus puestos en la Rambla, se ha montado el gran árbol de Navidad que tenemos en Almería y que para mi gusto es mucho mejor que cualquiera de los que se montan, por ejemplo, en Madrid. Pronto me tocará sentarme en el sillón en casa a ver LOVE ACTUALLY, bonita tradición la mía. Por cierto, ¿sabe alguien cuándo se inaugura el alumbrado extraordinario de Navidad en Almería?

Llega la época de las compras, la solidaridad, la alegría, la esperanza cristiana. El mundo en general parece un lugar un poco mejor en Navidad y desde que llega el Adviendo ya es un poco Navidad en nuestras calles.

Por cierto, yo que soy muy navideño, quisiera felicitar a todos los ayuntamientos que sin renunciar a la ornamentación extraordinaria de estos días están sabiendo recortar en esas partidas presupuestarias. Este año por ejemplo es el primero, que yo recuerde, en que no habrá luces de Navidad en mi calle y esto, que me crea una cierta nostalgia, ciertamente me hace sentir bien pues son tiempos para eso: racionalizar. Choca, en cambio, la postura de un Ayuntamiento como el de Sevilla que con la excusa del turismo ha aumentado la partida de gastos en alumbrado navideño. Servidor no lo entiende.

En fin, queridos lectores, que disfrutéis del Adviento y de la Navidad, aunque ya volveré para felicitarla oportunamente.