lunes, 30 de junio de 2014

El Mundialito cofrade.

Spoiler: entrada imparcial.

Ha tenido lugar este fin de semana un Mundialito cofrade en el que no he participado, pero al que sí me he acercado un par de veces. He visto jugar a Resucitado, Amor, Coronación, Pasión, Prendimiento y Unidad. Alguna hermandad se me quedará en el tintero.


No sé muy bien de dónde nace lo del Mundialito, ni si su fin real es el de conseguir alimentos como obra de caridad.

Tal y como yo lo veo debe tratarse de un evento donde, con la excusa del futbito, se consigan alimentos y se fomenten las buenas relaciones entre los componentes de las distintas hermandades. Y ciertamente eso lo he visto en varios partidos.

Pero, como de costumbre, lo negativo destaca aunque sea menos. Es una pena que haya personas que pierden de vista lo que somos y lo que hacemos. Si somos hermandades y somos cristianos, no son admisibles algunos de los comportamientos que se dieron en la pista del Barrio San Luis durante el fin de semana.

Me dolió especialmente el caso en el que un jugador de un equipo cometió una falta sobre otro, al que ya le estaba pidiendo disculpas antes de que el sufridor de la infracción llegase al suelo y, sin embargo, recibió por respuesta un encaramiento chulesco y barriobajero del jugador. Y todo esto ocurrió con el Hermano Mayor de la Hermandad a la que representaba en ese momento el bravucón de turno tan agusto en el banquillo de su equipo. Tengo claro que si yo soy Hermano Mayor y yo quiero a mi Hermandad le digo al bravucón que así no y lo aparto, al menos temporalmente, de la pista.

¿A qué se deben ciertas actitudes que se han visto en el Mundialito? Se deben a que perdemos el Norte, a que no sabemos para lo que realmente estamos allí y a que no tenemos las luces mínimas de darnos cuenta de que cuando hacemos un equipo de nuestra Hermandad, en cierto modo la estamos representando. Me hubiera gustado ver esos piques por ser la Hermandad que más alimentos o más dinero aporta a la obra social que se oculta tras el Mundialito. ¿Jugamos a imaginar por un momento que se hubiesen juntado allí unos cuantos no-cofrades y nos quisiesen juzgar por lo que allí se vio?

Precisamente por ello quiero felicitar expresamente a Coronación que, siendo semifinalista, ha recibido el premio al Fair Play. Premio que, si fuésemos serios, debería ser de lo más importante del fin de semana.

1 comentario:

  1. Por desgracia parte de hermanos y simpatizantes de la Semana Santa somos así y, a veces, se nos olvida qué representamos... Necesitamos un buen examen de conciencia...

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