lunes, 23 de abril de 2012

Lunes Santo 2012

Me gusta el Lunes Santo almeriense porque tiene de todo un poco: nos encontramos con la Macarena, bulliciosa, casi festiva; tenemos a Gran Poder, seria y solemne como la que más; y tenemos también a Pasión cuyo calificativo soñado es la elegancia y que nos muestran que entre la bulla y el silencio hay términos medios muy interesantes.

Mi Lunes Santo cofrade suele empezar en la salida de Pasión; es raro que no ande yo por ahí. Este año me agradó mucho la salida del Cristo que en una chicotá empalmó la rampa mientras sonaba alguna saeta, la primera revirá con "Reo de muerte" y la segunda con "Y le llaman Pasión". Como ambas marchas me parecen fantásticas, aquello me resultó delicioso. Y como lo último que había visto era a la Cena encerrándose, la salida del Cristo de Pasión, con sus muchas diferencias, me recordó a la demostración de fuerza que pude ver la noche anterior. El palio anda como anda y ahí va, afortunadamente nada que ver ya con aquellos primeros años. De esta hermandad sí quiero destacar dos cosas: 1) el maravilloso patrimonio que sigue acumulando y que actualmente se va materializando en un paso de palio que será -ni lo duden- una joya. Eso sí, los bordones o borlones (que no recuerdo cómo se llaman) me parecen sencillamente horrorosos. Antes mis ojos son pura ostentación. En cambio el Relicario y la Gloria (los otros estrenos de este año) sí me parecen muy bonitos. 2) El andar de los pasos me resulta soberanamente aburrido. A ese Cristo con esa Agrupación Musical detrás le cabe algo más. Lógicamente es una opinión y como tal es muy, muy discutida y discutible.

La Macarena la vi saliendo de Carrera Oficial y no la pude disfrutar en exceso, por eso mismo no puedo decir demasiado. Sí tengo claro que el misterio es grandioso y que la cuadrilla es más que notable, seguramente sobresaliente.

La Hermandad del Gran Poder me parece una hermandad como la copa de un pino. No me gusta el hecho de que la imagen sea una copia total del Gran Poder sevillano pero aun así cada Lunes Santo me rindo ante una hermandad que viene de lejos, que viene con seriedad, con orden, con una estética cuidada y con una cuadrilla que nos muestra que andando en silencio se puede andar muy bonito, más aun cuando andas como anda Él, con esa majestuosidad tan exclusiva. Yo creo que Almería cada año es un poquito más del Gran Poder como lo es también del Perdón pues son hermandades que contrastan con el resto de la semana.

1 comentario:

  1. Es el primer año en 9 años que veo semana santa el Lunes Santo ya que no he salido en Desamparados...y no es porque no haya querido yo...en fin

    El Gran poder me encantó y la macarena la vi cuando le apagaron las luces y el misterio pues muy fiel a lo suyo, como debe ser.

    En cuanto a Pasión, los de la Virgen se mosquean porque los del Cristo van despacio, pero los de la Virgen no saben que es un cristo que anda diferente a los demás, sin cambios, lento y sencillo, como debe andar un cristo que lleva la cruz a cuesta camino al calvario y no que le arda el ojete...ya basta de ver a todos los pasos andar siempre de la misma manera, la virgen al menos, ya anda de frente y no como antes pasito de bebé...

    Un saludo Y GRAN ENTRADA

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