Vamos a seguir un poco más con este mini resumen de la Semana Santa de Almería. Me quedé por el Miércoles Santo y me faltó volver a recalcar lo bonito que es ver encerrarse a Prendimiento desde dentro de la Catedral, especialmente con lo que supone disfrutar de La Pasión de Linares en la fantástica acústica del templo catedralicio.
El Jueves Santo fue lluvioso. Parecía que la tarde iba funcionando pero en pocos minutos cayó una tromba de agua monumental. Eso y el curioso artefacto volador que sobrevoló la Rambla en los minutos previos y durante el Encuentro fueron las noticias desagradables del día en que el Nazareno por primera vez salía a costal. Esto creo que es un acierto de la hermandad pues es lo que nos va en Almería. A Angustias no pude verla en directo aunque por circunstancias desagradables por la lluvia pude ver sus majestuosos pasos al día siguiente en la nueva (futura) Capilla de Prendimiento. Sin conocer demasiado sobre el tema, opino que debieron esperar y retomar su salida procesional cuando escampó, como hizo Encuentro. La nota positiva de la jornada vino por parte de la hermandad de Silencio que aunque debieron pasar un muy mal rato pudieron disfrutar de una noche más que apacible. Dicen que tras la tormenta siempre llega la calma.
El Viernes Santo es día de recogimiento en Almería. Hace pocos años "el San Juan" nos recordaba que estamos en Almería y que celebramos la Resurrección de Cristo más que su muerte. Pero hoy en día ya no es así. De esta noche me gusta especialmente Caridad y deja de gustarme que diputados de tramo de Soledad impidiesen a sus nazarenos dar cera a los niñós que hacen bolas con ella. Mal.
Y el Domingo de Resurrección queda para la tercera y última entrega de esta miniserie de crónicas cofrades amontonadas.
Un viernes santo celebrar la Pascua de Resurrección, me pierdo....
ResponderEliminarOk,anónimo, tienes toda la razón porque lo he expresado muy mal. Lo que quiero decir es que ese mismo Viernes Santo se conmemore la Muerte de Cristo pero que se haga sin perder de vista los efectos salvíficos de esa Muerte y, sobre todo, la inminente ALEGRÍA de la Resurrección.
ResponderEliminarEs que a veces se escriben las entradas de un tirón y uno no es todo lo preciso que querría, máxime teniendo en cuenta que prefiero que mis entradas sean más bien cortas a que se alarguen en exceso.
Gracias por comentar y la próxima vez, si es posible, firma tus comentarios y sabré con quién hablo.